Básquet

“Simplemente gracias”

Sábado 22 de Abril de 2017
Por Germán Intonio (técnico de la Primera División de básquet). Tercer partido de los octavos de final del playoff de la Conferencia Sur (Racing 70- Rivadvia 77).
“Simplemente gracias”
Perdimos 3 a 0 la serie, llegó el final de la temporada y me quedan sensaciones encontradas. Al igual que en el resto del equipo, persiste la tristeza porque sabemos que pudimos haber ganado en Mendoza y porque nos eliminaron en casa. Sin embargo, soy conciente de que, en el balance final, por ser la primera temporada en esta categoría, el balance es positivo.

Nos dejó afuera un equipo que jugó mejor que nosotros o que, al menos, estuvo más certero para no cometer fallas. Con respecto al juego, siento que no logramos mantener una postura sólida durante los 40 minutos. En tres de los cuatro parciales, recibimos más de 23 puntos y eso es algo que no se puede permitir de local. Empezamos tibios defensivamente y eso nos dejó abajo en el primer cuarto. En el segundo, la rotación del banco nos puso otra vez en partido, nos convirtieron sólo 6 puntos y pasamos al frente a pura energía. 

De ahí en más, no conseguimos tener el tono de agresividad adecuado y sufrimos muchas pérdidas no forzadas por el rival. Durante toda la temporada tuvimos ese problema y este encuentro no fue la excepción. Con un parcial de 15 a 0 en contra en el último cuarto, todo se complicó. Los jugadores intentaron hasta el final y, si bien achicamos hasta quedar a 4, el reloj no nos ofreció margen para la remontada.

Quiero felicitar a Rivadavia, que demostró una vez más un muy buen juego colectivo. El arbitraje, a diferencia de lo que ocurrió en el segundo partido en Mendoza, también contó con la jerarquía necesaria. Sólo me queda agradecerles a todos los que hicieron posible esta temporada: jugadores, cuerpo técnico, dirigentes, periodistas y trabajadores de mantenimiento. 

Hoy Racing está presente en un torneo nacional y eso no es poco. Ojalá el club siga apostando a crecer y se proponga de mínima superar lo hecho hasta ahora. Estoy seguro de que se puede hacer y de que la gente acompañará como lo hizo este año. El recorrido desde el Torneo Prefederal me llena de orgullo. Les agradezco a todos y les confieso un deseo: no quiero que ésta sea la última columna.

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