Efemérides

Ídolos académicos: Sergio Livingstone, un señor de guantes

Viernes 11 de Septiembre de 2015
El Sapo, arquero de alto nivel, arribó al club en 1943, proveniente de la Universidad Católica, y atajó un año en Racing. Pese a que no estuvo mucho tiempo en Avellaneda, el Cilindro todavía lo recuerda con cariño. 
Ídolos académicos: Sergio Livingstone, un señor de guantes
Primera verdad que está clara: la historia no empezó ayer. Segunda verdad indiscutible: la historia merece ser contada. Tercera verdad irrefutable: es fundamental conocer la historia para saber quién es uno y hacia dónde va uno. Racing, con 112 años de vida, con un pasado repleto de gloria, tuvo a lo largo de tantos años símbolos que forjaron la identidad del club, que desataron el amor de multitudes y que le entregaron la grandeza de la que todavía hoy disfruta. Por eso, como homenaje respetuoso, como saludo eterno, se los recuerda en las fechas que ya les pertenecen. A los ídolos académicos, simplemente gracias. 

¿Podría Sergio Livingstone haberse dedicado a otra cosa? Difícil, muy difícil. Juan Livingstone Eves, su papá, fue uno de los impulsores del desarrollo del fútbol en Chile y jugó en Santiago National durante varios años. Además, según se cuenta, fue también el primero en llevar una pelota al país trasandino. Por lo tanto, a nadie le llamó la atención que el pequeño Sergio se destacara en el arco del Colegio San Ignacio de la capital trasandina. De ahí en más, lo que ya se conoce: una carrera brillante que incluyó un breve pero importante paso por Racing en 1943 en el que fue figura de un equipo que no alcanzó a pelear por el título.

Nacido el 26 de marzo de 1920, su estreno en Primera ocurrió en 1938 en la Universidad Católica. Su reputación debajo de los tres palos creció con el tiempo y la Academia decidió pagar $280.000, lo que en aquel momento era mucho dinero, para contar con sus servicios. Debutó el 11 de abril de 1943 en un amistoso ante Boca que acabó con una derrota por 4 a 2. Disputó en total 30 partidos con la camiseta celeste y blanca, fue elegido segundo mejor portero del torneo –detrás de Gabriel María Ogando, de Estudiantes- y sucedió a José Salomón como capitán del plantel. Su partida se debió exclusivamente a que extrañaba mucho a su mujer. 
 
Sus rendimientos lo llevaron, con absoluta lógica, a la selección de Chile. Participó del Mundial de Brasil 1950 –atajó en tres encuentros- y, como si fuera poco, es, con 34 presencias, el jugador que más veces compitió en la Copa América –antes denominada Campeonato Sudamericano-. Ya fuera de las canchas, se dedicó a la comunicación y recibió en 1987 el Premio Nacional de Periodismo Deportivo.   

El 11 de septiembre de 2012, Livingstone falleció a los 92 años. En ese momento, Racing le envió a su familia sinceras condolencias. Hoy, a tres años de la triste noticia, el club hace memoria para no olvidar su paso por el Cilindro.