Efemérides

Ídolos académicos: José Salomón, más que un defensor

Lunes 23 de Enero de 2017
Capitán y dueño de la zaga durante 1939 y 1945, se destacó por su personalidad dentro de la cancha. Fue campeón de la Copa de Competencia Británica George VI y figura en la Selección. Nadie lo olvida en el club.
Ídolos académicos: José Salomón, más que un defensor
Primera verdad que está clara: la historia no empezó ayer. Segunda verdad indiscutible: la historia merece ser contada. Tercera verdad irrefutable: es fundamental conocer la historia para saber quién es uno y hacia dónde va uno. Racing, con 113 años de vida, con un pasado repleto de gloria, tuvo a lo largo de tantos años símbolos que forjaron la identidad del club, que desataron el amor de multitudes y que le entregaron la grandeza de la que todavía hoy disfruta. Por eso, como homenaje respetuoso, como saludo eterno, se los recuerda en las fechas que ya les pertenecen. A los ídolos académicos, simplemente gracias. 

A veces sucede que un apodo dice mucho de una persona. A José Salomón lo llamaban Caballero del fútbol y estaba bien. Porque resultaba imposible poner en discusión su categoría. Adentro de la cancha, Salo era una verdadera garantía de seguridad. Para los delanteros contrarios, esquivarlo era un problema que muy rara vez tenía solución. Por lo general, más allá de los intentos desesperados de los atacantes, la pelota quedaba en los pies del zaguero nacido el 9 de julio de 1916 en La Plata. Su carrera comenzó en 1934, a los 18 años, en Talleres de Remedios de Escalada. Recién en 1939, debido a sus actuaciones cada vez más destacadas, pudo dar el gran salto y pasar a vestir la camiseta de Racing.

Los que disfrutaron el privilegio de verlo jugar aseguran que poseía una gran calidad para medir los tiempos, para ordenar a sus compañeros y para superar las adversidades. No pudo conseguir muchos títulos con la Academia pero eso no le impidió ser una referencia ineludible para los hinchas. Sí logró conquistar la Copa de Competencia Británica George VI en 1945 tras golear en la final, disputada en la cancha de San Lorenzo, a Boca por 4 a 1. Ese día, la formación del conjunto de Guillermo Stábile fue Manuel Graneros, Salomón, Juan Filgueiras, León Strembel, Carlos Quiroga, José García, José Yuzzolino, Federico Monestés, Roberto D’Alessandro, Humberto Fiore y Ezra Sued. En total, participó de 217 juegos con la casaca del cuadro de Avellaneda.

Salomón fue además bastión de la Selección. Durante 1940 y 1946, jugó 44 encuentros –fue capitán del equipo en 28- y ganó los Campeonatos Sudamericanos de 1941, de 1945 y de 1946. Tiene el récord, junto a Oscar Ruggeri, de haber estado presente en 21 duelos de ese certamen. Después de un paso fugaz por Liverpool de Uruguay, se retiró en 1950. Acumulaba en su espalda 310 partidos en Primera División. Ya fuera del campo, se dedicó a ser comentarista radial.  

Una afección cardíaca complicó su salud y Salomón falleció el 23 de enero de 1990. En un nuevo aniversario de su muerte, Racing levanta su bandera para mantener la memoria de pie.