Efemérides

Ídolos académicos: ¡Feliz cumple, Chango!

Martes 25 de Julio de 2017
Autor de uno de los goles más importantes de la historia académica, Juan Carlos Cárdenas está hoy de celebración. Su gol al Celtic en el estadio Centenario quedará grabado para siempre en la memoria racinguista.
Ídolos académicos: ¡Feliz cumple, Chango!
Primera verdad que está clara: la historia no empezó ayer. Segunda verdad indiscutible: la historia merece ser contada. Tercera verdad irrefutable: es fundamental conocer la historia para saber quién es uno y hacia dónde va uno. Racing, con 114 años de vida, con un pasado repleto de gloria, tuvo a lo largo de tantos años símbolos que forjaron la identidad del club, que desataron el amor de multitudes y que le entregaron la grandeza de la que todavía hoy disfruta. Por eso, como homenaje respetuoso, como saludo eterno, se los recuerda en las fechas que ya les pertenecen. A los ídolos académicos, simplemente gracias. 

Decidir bien en los instantes adecuados puede significar la entrada al paraíso. Y eso es lo que sucedió en este caso: en el momento exacto, la ejecución exacta. Un control de pelota que se le levanta, el tiempo adecuado para ponerla otra vez contra el suelo y unos breves segundos que permiten avanzar hacia el arco contrario. Los rivales que achican desesperados para evitar lo inevitable. La pierna izquierda va hacia atrás y consigue el impulso. Después, lo que se sabe, lo que se rememora cada 4 de noviembre, lo que se hace propio aunque pasen los años: un tiro sensacional e inigualable que se cuela en el ángulo superior derecho de un arquero que, por más que no lo quiera, sólo podrá morder el polvo; un zapatazo sorpresivo y contundente que le da a la Academia el triunfo en el estadio Centenario, ante el Celtic escocés, en el tercer partido de la final de la Copa Intercontinental. Ese es Juan Carlos Cárdenas, el Chango, el artífice del que probablemente sea el gol más importante de la historia de Racing, un héroe infinito.

Solamente 17 años tenía el 25 de febrero de 1962. Ese día, Cárdenas, que jugaba originalmente en Unión Santiago, un conjunto de su provincia natal, debutó oficialmente con la camiseta celeste y blanca. Fue ante Nacional de Montevideo, por la Copa Libertadores, en un empate 2 a 2 que pasó a la historia porque fue la presentación de un jugador clave para la grandeza futura. Luego de un breve paso por Nueva Chicago, regresó al Cilindro en 1964 para quedarse de corrido hasta 1972. Volvería por última vez en 1976, después de haber estado cuatro años en el fútbol mexicano, ya para ponerle fin a su carrera. En total, disputó 297 encuentros en Racing y convirtió, nada más ni nada menos, 89 goles. Es, a la vez, el décimo artillero histórico y el cuarto futbolista con más presencias en la cancha. 
     
Bajo las órdenes de Juan José Pizzuti, en el mítico Equipo de José, se coronó en el campeonato de 1966 y conquistó la Copa Libertadores 1967 y la Intercontinental 1967. Vital resultó su olfato goleador durante ese proceso que le permitió a Racing transformarse en el primer club argentino en consagrarse a nivel mundial: 7 tantos en el torneo local, 7 en el certamen continental y 2 en el cruce con el Celtic lo volvieron la principal carta ofensiva de la Academia. Tanta eficacia en ataque lo llevó también a la Selección en 1967. Pero, como si fuera poco, el Chango también se destacó en el arco propio: al igual que Agustín Pelletieri ante San Martín de San Juan, el 22 de agosto de 1971 le atajó un penal a Roberto Gramajo, delantero de Rosario Central.

Nacido el 25 de julio de 1945 en Santiago del Estero, Cárdenas cumple hoy 72 años. Racing lo saluda y le desea lo mejor en este día tan especial.