Handball

“Ser bicampeonas era un sueño de todas”

Viernes 01 de Agosto de 2014
En el Cilindrito todavía se festeja: las Juveniles consiguieron el título por segundo año consecutivo y quieren ir por más. María Luz Monzón, Malena Sosa y Celeste Junod le contaron al sitio oficial la intimidad de una campaña impresionante.
“Ser bicampeonas era un sueño de todas”
Hay una entrada triunfal al estadio. Caminando, una detrás de la otra, una al lado de la otra, las campeonas pisan el césped más glorioso para una cita fotográfica que las tiene como protagonistas. Son muchas, aunque falten algunas de las que formaron parte del proceso que condujo al título. Mientras avanzan a paso firme hasta el escudo que se ubica en el centro del Cilindro y que funciona como meta de la caminata, se miran, se sonríen y contienen como mejor les sale los nervios. Saben que son campeonas y saben que fueron convocadas por Racingclub.com.ar para una nota que buscará exponer ante los hinchas la gran campaña que realizaron en la primera mitad del año. Pese a que conocen eso, no están del todo sueltas. Cómodas de verdad se sienten cuando juegan en el Cilindrito; cómodas de verdad se sienten cuando les corre la adrenalina de estar defendiendo la camiseta académica. Finalmente, arreglan las poses adecuadas para que los pelos les salgan ordenados y se escucha el flash que deja grabado para la historia ese momento. Es el plantel juvenil de handball femenino el que queda retratado. 

La actividad comenzó a desarrollarse en el club en marzo de 2013 y, desde ahí, tuvo un crecimiento importante. El desarrollo estuvo acompañado de resultados y este equipo, que hoy dirige Guillermo Soteras, logró la corona en su primer año de competencia. Sin embargo, no conformes con eso, las chicas apuntaron a más y repitieron la hazaña hace un par de semanas. Celebraron en casa, con su gente, envueltas en un mar de cantos, de abrazos y de papelitos. ¿Quiénes son? ¿Cómo se llaman? Lara Marelli, Carla Atencio, Natalia Fernández, María Luz Monzón, Micaela Figueiras, Malena Sosa, Celeste Junod, María Sol Ballón, Malena Querejeta, Rocío Brítez, Anyela Mostacera, Noelia Giannasi, Agustina Masello, Magalí Chávez, Camila Belardo, Rosario Russo, Camila Cardillo, Daiana Gutiérrez y Julieta Pasteris. Orgullo racinguista, todas y cada una empujaron desde su lugar para cumplir el sueño y la felicidad está a la vista de quien quiera disfrutarla.

Hubo fotos de todos los colores y hubo también, luego de que a nadie le faltara su imagen para la posteridad, una charla sincera con tres de las referentes del grupo. En el Recinto de Honor, con la mirada de las grandes figuras de la historia del club de fondo, Monzón -arquera, de 17 años, ganadora del premio a la deportista de julio de Racing-, Sosa -pivote, de 17 años- y Junod -extremo,  de 16 años- charlaron con el sitio oficial y contaron las razones por las cuales llegaron hasta donde llegaron y consiguieron lo que consiguieron. Jóvenes con futuro, Racing con futuro. Acá, la intimidad de un verdadero campeón.

-¿Cómo fue que empezaron a jugar al handball en el club?

Luz: -Nosotras (y la mira a Malena) empezamos porque Fede (Federico Ronsino, coordinador de deportes amateurs) y Damián (delegado de la actividad) vinieron a nuestro colegio a contar que se había abierto la actividad. Dijimos que sí, nos sumamos y enseguida nos enganchamos con el grupo.

Malena: -Ellos se habían enterado de que nosotras habíamos jugado los torneos municipales de Avellaneda y habíamos salido campeonas. Entonces nos ofrecieron venir a jugar acá. Nos gustó y nos quedamos.

Celeste: -Lo mío es distinto. Yo hacía handball en el colegio y quería hacerlo también aparte, con más intensidad. Y justo vi que estaba esa posibilidad en Racing y fue justo lo que necesitaba. 

-Ustedes están desde el inicio de la actividad, allá en 2013. ¿Cómo fueron los primeros momentos?

Luz: -Cuando arrancamos, estábamos todos juntos, éramos un solo grupo. Mayores, Juniors y Juveniles armábamos un solo equipo porque había poca gente. Después, se fueron sumando y nos fuimos separando de acuerdo a la edad. Fuimos mejorando mucho en el compañerismo hasta llegar a lo que somos hoy. 

Malena: -Cambiamos mucho en este año y medio. Mucha gente se enteró y se acercó. Y eso fue importante. Fuimos ganando en compañerismo y eso potenció al grupo. Además, hubo arreglos en la cancha y bastante gente se arrimó a ayudar con materiales. 

-¿Y hoy cómo están las cosas? A la vista, parece que son muchos más.

Celeste: -Hoy somos 50 o 60 más o menos. Cuando empezamos, no éramos más de 20. El vínculo del grupo se fue formando con los entrenamientos y hoy ya no somos solamente compañeras sino también amigas. De alguna manera, ellas y las demás se volvieron mis hermanas. Además, siempre tratamos de integrar rápidamente a las nuevas para que se sientan bien. 

-Les fue muy bien este año. ¿Por qué creen que pudieron conseguir el título de nuevo?

Luz: -En los entrenamientos y en los partidos, ante cualquier error, nos apoyamos y nos corregimos de buena manera. Eso nos vuelve diferentes del resto. 

Malena: -Especialmente en los partidos, no somos de insultarnos ni nada parecido. Somos más bien de darnos ánimos para poder seguir adelante. 

-¿O sea que lo anímico es uno de sus puntos fuertes?

Luz: -Sí, eso mismo. Aprendimos mucho en poco tiempo también. No nos quedamos solamente con lo que nos dice el técnico sino que nos ayudamos para superar los errores que vamos teniendo. 

Celeste: -Ponemos todo de cada una porque salir campeonas era un sueño de todas. 

Malena: -Perdimos un solo partido y estuvimos algunos días algo caídas. Pero enseguida pudimos recuperarnos y no nos ganaron más. 

Luz: -Además, en el verano, cuando no hay actividad, nosotras armamos torneos relámpagos o cosas así para no perder el ritmo. 

-¿Cuál fue el partido más importante del campeonato?

Luz: -Clave fue el primero que jugamos, contra Sportivo Alsina. Íbamos gol a gol y, en un momento, nos empezamos a caer. Cuando faltaba poco para el final, nos pusimos las pilas y lo terminamos dando vuelta. Pudimos remontarlo y ese fue el paso inicial.

-Lograron el objetivo como locales, acá en el Cilindrito, con la gente apoyándolas. ¿Cómo vivieron ese momento?

Celeste: -Fue muy lindo. Festejar con un grupo y que estemos todas juntas fue muy lindo. Nos pudimos descargar. Yo creo que todo lo que se siembra se cosecha y que fue merecido el premio que recibimos.

Malena: -Nos vino bien porque uno hace mucho esfuerzo para poder venir. Deja de estudiar o deja otras obligaciones porque le gusta estar acá. Se hace un lugarcito de alguna manera y esas son las cosas que después festejamos. 

-Ahora van a empezar a competir en otra categoría. ¿Les tienta el desafío de seguir creciendo?

Luz: -Sí, es un desafío lindo. Ahora nos vamos a separar las Juveniles y las Cadetes y tendremos que tratar de pelear por el ascenso nosotras solas.

Celeste: -No va a ser fácil dejar de jugar con ellas. Pero igual me gusta la idea de que el handball siga creciendo acá en el club.

Malena: Va a ser todo novedoso y nos llevará esfuerzo. Son muchos equipos que no conocemos y vamos a tener que trabajar para poder estar entre los mejores.