No fue una noche sencilla pero acabó en sonrisa. A Racing le costó más de lo que los papeles indicaban pero terminó consiguiendo el pasaje a los cuartos de final de la Copa Argentina. La Academia no pudo mostrar su mejor nivel en el Estadio Bicentenario de San Juan y, después de empatar 1 a 1 con Atlanta en los 90 minutos, no tuvo más remedio que definir la clasificación desde los doce pasos. La categoría de Sebastián Saja apareció en el instante adecuado y el campeón del fútbol argentino, que ahora se medirá con San Lorenzo, festejó por 4 a 2 en los penales para avanzar al selecto grupo de los ocho mejores del torneo.

Poco fútbol se vio en la primera parte. Sobraron las imprecisiones y faltaron las ocasiones de peligro. Saja tapó dos pelotas importantes para garantizar el cero parcial en su arco y el equipo de Diego Cocca no halló la manera de imponer condiciones en el terreno. Marcos Acuña se fue expulsado poco antes del descanso y eso complicó más aún la historia. En el arranque del complemento, exactamente a los seis minutos, Mariano Pavone aprovechó un contragolpe veloz para quebrar la paridad con una buena mediavuelta. Todo parecía encaminarse, aunque restaba demasiado.

Cocca metió dos cambios para renovar el andar colectivo. Ezequiel Videla regresó después de varias semanas afuera de las canchas y reemplazó a Luciano Aued. Además, Brian Mansilla hizo su estreno en Primera ocupando el lugar de Ricardo Noir. Sin embargo, cuando peor estaba, Atlanta encontró de penal el empate. Juan Galeano definió bien y obligó al suspenso. Oscar Romero ingresó por Santiago Nagüel. No hubo forma de dar con el gol. Hasta que llegó el momento decisivo. Saja, Iván Pillud y Romero convirtieron. Galeano erró pero Luciano Lollo también. Y ahí, cuando más las papas quemaban, el arquero académico voló contra su poste izquierdo y contuvo el tiro de Emiliano Bonfigli. Y Racing festejó. El campeón se mantiene en carrera.