En el Predio Tita Mattiussi, a Kevin Facundo Gutiérrez nadie le dice ni Kevin ni Facundo ni Gutiérrez. Es Facha. Así, a secas: Facha. Y Facha juega siempre en corto y explica con mucha claridad por qué Racing le ganó a Independiente el clásico de Reserva. Y Facha, nacido el 3 de junio de 1997 en Lanús, es de esos pibes que conocen de memoria qué significa defender la camiseta de la Academia. Está desde hace mucho en el club y se siente parte de una identidad potente. Nada de esto es casualidad sino fruto del trabajo que se realiza a diario para estimular el sentido de pertenencia. Enterate entonces, a través de una charla en medio de las sonrisas por haber festejado ante el rival de toda la vida, quién es este muchacho que tanto promete.

-Se te ve feliz, Facha. ¿Cuánto vale este triunfo para ustedes?
-Muchísimo. Nos preparamos en la semana para esto. Buscamos entregar el máximo en cada partido. Hoy realmente no dábamos más pero fuimos inteligentes, no aflojamos en ningún momento y terminamos siendo, a mi criterio, superiores. Haber sacado el clásico adelante es una alegría muy grande para mí. 

-No sos nuevo en el club y sabés lo que significa enfrentar a Independiente. ¿Cómo viven estos partidos los que están desde hace mucho en Racing?
-Es diferente a todo, es algo muy lindo. Yo tengo 18 años y estoy desde los 7 en el club. Son casi 12 años acá. Lo miro a la distancia y me parece mucho tiempo. Viví montones de cosas en este lugar. Por suerte, tuve la oportunidad de estar en el clásico, de hacer un buen partido y de ganarlo. El festejo en el vestuario me puso la piel de gallina. Fue una sensación única. 

-Hay muchos hinchas que todavía no tuvieron la posibilidad de verte jugar. ¿Qué tipo de futbolista sos?
-Soy mediocampista central. Siempre jugué ahí. Me gusta tener la pelota, pasársela bien a mis compañeros y soltarme para llegar al área rival. Suele hablar bastante adentro de la cancha porque quiero ser siempre protagonista. Me cuesta un poco más el tema de la marca pero vengo trabajando para crecer en ese aspecto. 

-¿Cuál es el primer recuerdo que tenés en Racing?
-Yo nací en Lanús y llegué al club porque el hijo de un técnico que tenía cuando era chico jugaba acá. Me acuerdo de ese día en el que me probé. Anduve bien y me eligieron. Arranqué de a poco, aprendí a querer estos colores y hoy estoy acá. Ahora, que soy más grande y que entiendo diferente las cosas, veo que fue un proceso largo pero lindo. Y, en todo este tiempo, vi crecer muchísimo a Racing. 

-¿Qué jugadores tenés como referentes?
-No hay uno que sea mi referente. Me gustaba mucho ver jugar a Riquelme, aunque no juega de lo mismo que yo. Y lo miro también a Gago, que sí es volante central. De los que están ahora en Racing, me encanta la calidad de Romero. Siempre aprendo cuando lo veo. 

-Todavía le queda mucho al 2016. ¿Qué objetivos te trazaste para lo que resta del año?
-Voy entrenamiento a entrenamiento. No me quiero apurar. El año pasado pude jugar algunos partidos en Reserva y desde enero estoy con el plantel. Todavía tengo mucho que aprender y me gusta estar con el grupo. Veo bien al equipo y siempre es lindo poder ir a entrenarse con la Primera. Creo que, si sigo trabajando así, en algún momento me llegará la oportunidad.