La gran victoria, que hoy parece fácil, es el resultado de pequeñas victorias que pasaron desapercibidas. 

La frase, pegada con chinches contra una pared, impresa con letras negras sobre una hoja blanca que se fue volviendo gris con los años, marca el rumbo de eso que ocurre a diario en el subsuelo de Nogoyá 3045. Estamos hablando de algo que no está ni en la mira de los flashes ni en la vista de las cámaras de televisión. Estamos hablando de una disciplina que se practica desde hace mucho en el club y que aprendió a convivir en las sombras del fútbol. Estamos hablando del taekwondo, que sale ahora a la luz en la vida de la Academia para contarles a todos los hinchas una noticia que causa orgullo: Ariel Serra, Ricardo Calzón y Mario Calzón, tres de los referentes de elite que se entrenan cotidianamente en Villa del Parque, viajarán a Jaimaica para participar del mundial que se desarrollará a finales de agosto. José Luis Soler, el director de la actividad, los preparará hasta el instante previo a que suban al avión. El sitio oficial los reunió a los cuatro para una charla profunda sobre qué significa esto de combinar la pasión por Racing con el amor por el deporte.   

Los cuatro son más que cuatro porque, en realidad, son más de 60 las personas que forman parte de los grupos que se dan cita los lunes y los miércoles, de 18 a 21, en la sede para construir el desarrollo de este arte marcial que pisó por primera vez los Juegos Olímpicos en 1988. Y los cuatro, además, son más que cuatro porque integran el inmenso plantel de los que viven haciendo hasta lo imposible para realizar desde el más puro amateurismo sus sueños. Por eso, vale la pena contar quiénes son. 

-No es nuevo el taekwondo en Racing. ¿Desde cuándo están acá con esta actividad?

Soler: -Acá en el club, esto viene desde hace mucho tiempo, desde 1998. Pero yo hace 30 años que me dedico al taekwondo. Arranqué de casualidad, de pura casualidad. Fui a un gimnasio porque tenía que hacer trabajos de fortalecimiento y ahí me enganché. Y no paré nunca más. Cuando llegamos a Racing, estaba todo destruido. Ayudamos todo lo que pudimos para arreglar lo que estaba mal. Hemos pintado paredes y pulido pisos por propia voluntad varias veces. Hasta que conseguimos una parte del subsuelo, que estaba abandonada, y la remodelamos para poder tener un salón más grande para la actividad. 

Su segunda casa. Así sienten los cuatro a Racing. Y es lógico. Pasan muchas horas encerrados, vestidos con el traje blanco característico del taekwondo, ultimando los detalles para partir al Caribe a representar a la Academia y al país de la mejor manera posible. El 22 de agosto iniciarán la travesía y se instalarán inmediatamente junto a los miles de competidores que se congregarán en torno a la cita más esperada. Del 26 al 30 le darán rienda suelta a la ilusión de traer a casa una medalla. 

-Hay muchos hinchas que no los conocen. Cuéntenme sus historias.

Serra: -Tengo 37 años, soy V DAN y desde 1987 me dedico a esto. Fui a cinco campeonatos mundiales en nombre de la Argentina. En 1998, salí campeón en Inglaterra; en 2000, fui subcampeón en Holanda; en 2005, viajé a Italia y terminé segundo; en 2010 y en 2013, volví a Inglaterra; y, en 2011, estuve en Estados Unidos y fui tercero. En el medio, no pude ir a todos porque el deporte es absolutamente amateur y a veces no nos alcanza la plata.

Mario Calzón: -Yo tengo 29 años y soy II DAN. Arranqué en 1989 y siempre me apasionó el taekwondo. Participé de algunos torneos internacionales pero de ningún mundial. Éste va a ser el primero y voy a pelear de forma individual hasta 70 kilos. La verdad es que estoy nervioso pero tengo dónde apoyarme porque ellos tienen más experiencia. Espero poder estar a la altura. 

Ricardo Calzón: -Toda mi historia en el taekwondo tiene que ver con Racing. Tengo 30 años y soy III DAN, pero con la particularidad de que empecé acá y de que me recibí acá. Con mi hermano, caminábamos 20 cuadras de ida y 20 de vuelta para entrenarnos todos los días. Y, con el paso del tiempo, terminé dando clases: hoy estoy al frente de las clases de Infantiles, de Juveniles y de Adultos. 

-¿Con qué expectativas encaran la ida al Mundial?

Serra: -Tengo la esperanza de que me vaya bien. Para nosotros, el taekwondo es una pasión que llevamos adentro y hacemos todo el esfuerzo del mundo para lograr las cosas. Además, me dieron la noticia de que quedé en la Selección y voy a pelear también por equipos. 

Mario Calzón: -Estoy contento porque es muy bueno poder compartir esta experiencia con mi hermano y con un amigo como Ariel. Los tres somos compañeros pero también más que eso. Supongo que en esos días se viven cosas especiales por la importancia del momento. 

Ricardo Calzón: -Ojalá podamos conseguir medallas. Pero lo más importante es que podamos superarnos a nosotros mismos, que es una de las cosas fundamentales de esta disciplina. 

Soler: -Les va a ir muy bien a los chicos, por la actitud. Nosotros somos iguales que los jugadores del equipo de fútbol pero no cobramos. Pero las ganas son las mismas y vamos por todo. El ejemplo más claro es que nos vamos últimos de acá todos los días. Creo que son muy pocas las veces en las que no cerramos la sede (risas). 

-¿En qué situación está hoy la actividad en el club? 

Soler: -Está perfecta. Es un gran orgullo para nosotros. La formación de base es para armar el futuro y son muchos los chicos y las chicas que se acercan. No todos eligen el camino de la alta competencia pero lo valioso es que todos participen de alguna manera.

Ricardo Calzón: Hay más de 20 chiquitos entrenándose con nosotros. Van pasando de cinturón y compiten dentro del circuito oficial. Este año, se recibieron de cinturón negro dos chicos que comenzaron acá y eso, por supuesto, nos motiva mucho. 

-Es evidente lo que entregan ustedes por el taekwondo. ¿Qué es lo que más los apasiona de la actividad?

Soler: -Es uno de los deportes más completos y es compatible con cualquier otra actividad. Y eso no pasa con todas las disciplinas.

Ricardo Calzón: Entrenarnos nos apasiona. Superarnos día a día nos apasiona. Llegar a hacer cosas que antes no me salían.

Serra: Yo encuentro un equilibrio en el taekwondo. Trabajo de una cosa que no tiene nada que ver con esto y venir acá me da un equilibrio en todos los sentidos. 

Mario Calzón: Para mí, es un estilo de vida. No porque vayas tirando patadas por la calle pero sí por la filosofía. Tiene que ve con una manera de llevar los problemas o los temas que tenemos todos. Practicar me permite apoyarme en mis compañeros, concentrarme solamente en esto y dar todo lo que tengo. 

-¿Tienen pensado ir al mundial vestidos de Racing?

Serra: -Sí, claro. A nosotros nos da orgullo decir que somos de Racing cuando vamos a competir. Es lindo poder defender los colores del club.

Ricardo Calzón: -En la competencia, tenemos que usar el uniforme reglamentario. Pero siempre, en cuanto podemos, nos ponemos la camiseta. 

Mario Calzón: -No queríamos decirlo antes de tiempo pero ya lo tenemos decidido: si nos llega a ir bien, tenemos pensado recibir los premios con la camiseta de Racing puesta.