Hizo lo que tenía que hacer y del modo en que tenía que hacerlo. Racing Club demostró en su cancha y ante su público que adentro de la cancha le sobran argumentos para justificar su presente deportivo, que lo tiene como el equipo más regular en la División Metropolitana del Torneo Federal. Con una solvencia apoyada tanto en el juego como en el marcador y una diferencia que se hizo notoria ya ante el final del primer cuarto, la Academia venció 80-53 a José Hernández y sumó su décima victoria tras doce presentaciones.

Más allá del ímpetu de un adversario que intentó plantear un partido en igualdad de condiciones y de un calor por momentos sofocante, Racing impuso sus condiciones desde el arranque mismo de las acciones. El entrenador Intonio volvió a confiar en el quinteto titular desde el inicio y la elección no lo defraudó. Sus dirigidos mostraron pericia colectiva tanto en el ataque como en la defensa y las individualidades se destacaron a lo largo de los 40 minutos de partido. La figura excluyente de la noche en este aspecto fue Maximiliano Segón, que consiguió marcar 29 puntos a lo largo de la noche.

Bastaron tan sólo diez minutos para que el local consiguiera la ventaja que luego le daría el partido. Más allá que aún faltaba mucho partido, el parcial de 24-9 con que finalizó el cuarto inicial puso de manifiesto no sólo el nivel del equipo, sino lo difícil que sería para su rival intentar cambiar el desarrollo de las acciones. Ante este panorama el entrenador racinguista apeló a la rotación y les dio la chance a varios de los jugadores del banco de sumar puntos y minutos en el campo. José Hernández aprovechó varias pérdidas de su adversario en esos minutos y desde los tiros perimetrales redujo a diez la desventaja. Pero Racing volvió a pisar el acelerador deportivo y de nuevo las equivalencias se hicieron cada vez más distantes.

Después del contundente 39-23 con el que finalizó el primer tiempo, la tendencia no se modificó en los minutos posteriores. Intonio continuó con la rotación permanente de sus dirigidos, para ganarle la partida al incesante calor y en la cancha Eiguren se encargó de manejar los hilos de una formación que, con la ventaja y el desarrollo a su favor, controló las acciones pero nunca resignó su idea primigenia: buscar en todo momento el aro rival con agresividad y contundencia. Segón y Sebastián Álvarez volvieron a erigirse como las armas más efectivas en el ataque de un equipo que cerró el juego 80 a 53 con autoridad y no dejó dudas de la superioridad a su favor tras el cimbronazo de la chicharra de cierre en el Centro Deportivo de Avellaneda.
     
De esta forma los académicos volvieron a demostrar que su rendimiento no es una mera casualidad avalada por una buena noche en la cancha, sino una causalidad sostenida tras el paso de las fechas y apoyada en el buen desempeño colectivo e individual de los jugadores que componen el equipo. La próxima semana el desafío estará en San Justo y frente a Huracán. El objetivo estará orientado a seguir mejorando el desempeño colectivo para poder mantener el liderazgo de la División Metropolitana. Racing demuestra partido a partido que va por el camino indicado para poder lograrlo.  

Síntesis:

Racing Club (80): López Banegas (8), Álvarez (12), Eiguren (7), Segón (29), Jerez (8); Antoniuk (3), Esmok (0), Rioyo (2), D’Ambrosio (6), Tuminno (2), Cellio (0), Cnochaert (3). DT: Germán Intonio.

José Hernández (53): Diorio (5), Aguirre (9), Zocco (5), Talpone (2), Escobar (6); Villagra (11), Cobos (0), Massone (0), Vázquez (9), Cáceres (0), Sparapani (0), Kozuseck (6) .DT: P. Alfredo

Parciales: (24-9); (15-14); (22-10); (19-20).

Estadio: Centro Deportivo Racing Club.