Primera verdad que está clara: la historia no empezó ayer. Segunda verdad indiscutible: la historia merece ser contada. Tercera verdad irrefutable: es fundamental conocer la historia para saber quién es uno y hacia dónde va uno. Racing, con 114 años de vida, con un pasado repleto de gloria, tuvo a lo largo de tantos años símbolos que forjaron la identidad del club, que desataron el amor de multitudes y que le entregaron la grandeza de la que todavía hoy disfruta. Por eso, como homenaje respetuoso, como saludo eterno, se los recuerda en las fechas que ya les pertenecen. A los ídolos académicos, simplemente gracias. 

Sin tener chapa en el club, Reinaldo Carlos Merlo aceptó el desafío de devolver a Racing a los primeros planos de nuestro fútbol. No eran muchos los que confiaban en su capacidad en enero de 2001 porque no le sobraban pergaminos como entrenador y porque no traía en la espalda un vínculo afectivo con estos colores. Sin embargo, los grandes están acostumbrados a torcer la realidad y, a partir del esfuerzo cotidiano, Mostaza consiguió que la Academia sorteara las dificultades deportivas y se preparara para pelear por el torneo. Lo mejor, lo único, lo soñado, arribó en la segunda parte de un año complejo para la Argentina: después de tres décadas y media de espera, con un equipo sacrificado y comprometido, la sequía de títulos se terminó y Racing se abrazó a la gloria luego de tanta espera. 

“Paso a paso” fue la frase que acuñó Mostaza para conducir a lo más alto a un conjunto con muchas ganas y sin tantas estrellas. La campaña tuvo en vilo a la multitud racinguista, que acompañó en todos los estadios y que cerró el ciclo llenando dos canchas al mismo tiempo. Los hinchas, a modo de agradecimiento, le construyeron una estatua que se encuentra actualmente en el Recinto de Honor del Estadio Presidente Perón. Se marchó a mediados de 2002 pero regresó en dos oportunidades: en 2006 y en 2013. En ambas ocasiones, el entrenador recibió cariño por todos lados. 

Merlo dirigió también en otros equipos: en Los Andes, en River, en la Selección Sub 20, en Bolívar, en Chacarita, en Deportes Temuco, en Atlético Nacional, en Belgrano, en Estudiantes, en Barcelona de Ecuador, en Rosario Central, en Douglas Haig y en Colón. Como jugador, realizó toda su carrera en River. 

El gran Mostaza cumple hoy 66 años y Racing, en este día tan especial, le envía un saludo fraternal y sincero.