Efemérides

Rubén Sosa, jerarquía de campeón

Miércoles 12 de Septiembre de 2018
El Marqués fue campeón en 1958 y en 1961 con la camiseta de la Academia. Gran goleador, aportó categoría a la delantera. En un nuevo aniversario de su partida, el club lo recuerda con afecto. 
Rubén Sosa, jerarquía de campeón
“Un jugador que siempre dio todo y que fue muy feliz dentro de una cancha de fútbol”, dijo Rubén Sosa sobre sí mismo cuando alguna vez le tocó retratarse como futbolista. Goleador implacable que, según cuentan los que lo vieron jugar, mostraba una asombrosa facilidad para convertir por arriba, nació el 14 de noviembre de 1936, creció y se volvió crack andando por los potreros del barrio porteño de Coghlan. Asiduo concurrente de El Tábano, un club de barrio al que también acudían Julio Cozzi –gran arquero de Platense- y Roberto Goyeneche –símbolo del tango argentino-, su llegada a Racing se produjo en 1958. 

No a cualquiera le sucede. Pero al Marqués, como se lo conocía por su elegancia dentro del campo, sí: llegó al club y salió campeón, acompañado de Oreste Corbatta, de Juan José Pizzuti, de Pedro Manfredini y de Raúl Belén, casi inmediatamente. Ubicado como entreala izquierdo, convirtió 11 goles en ese torneo y fue, sin lugar a dudas, una de las figuras del conjunto comandado desde el banco por José Della Torre. En 1961, con una base similar a la que se consagró tres años antes, se coronó nuevamente con la camiseta celeste y blanca y colaboró otra vez con 11 conquistas. Pero, además, fue el goleador de los torneos de 1959, de 1960 y de 1962.

Estuvo en Avellaneda hasta 1964 y, en total, disputó 151 partidos oficiales. Los registros señalan que marcó 122 tantos –contando copas y amistosos- con la casaca académica. Sus rendimientos lo depositaron con absoluta justicia en la Selección: jugó el Mundial de Chile 1962 y se coronó en la Copa América de 1959. Mudado al fútbol uruguayo, estuvo en Cerro y en Nacional de Montevideo, equipo con el que enfrentó a Racing en la final de la Copa Libertadores de 1967. Según contó en alguna ocasión, le fue muy complicado jugar contra el club en el que había alcanzado la gloria. El final de su exitosa carrera fue en Boston Beacons, de Estados Unidos, y en Flandria. 

Sosa falleció a los 71 años y, en un nuevo aniversario de su partida, el club no olvida a un jugador que dejó su sello en el Cilindro.