Sucesor del fenomenal Pedro Ochoa, Adolfo Bernabé Zumelzú llegó a Racing con la obligación de continuar con un estilo de fútbol de jerarquía y lo logró gracias a su talento para jugar en el centro de la cancha. Nacido el 5 de enero de 1902, su carrera deportiva se inició en Tigre y siguió en Sportivo Palermo. En Avellaneda recaló más tarde y permaneció hasta 1926. Consiguió con la camiseta celeste y blanca el título de 1925, de forma invicta. Esa fue la última gran alegría de la Academia en el amateurismo.
Cuentan los que lo vieron jugar que no era un hombre rápido, aunque sí fuerte. Se destacaba por su técnica con la pelota en los pies. Siempre se ofrecía como salida para darle fluidez en la circulación a los suyos. Además, era de esos que nunca abandonan y que pelean en todas las circunstancias hasta el final. Todas esas virtudes lo transformaron a Coco, como se lo conocía en el ambiente, en titular indiscutido durante muchas temporadas.
Sus actuaciones lo condujeron a la Selección. Participó de los Juegos Olímpicos de 1928 y del Mundial de Uruguay de 1930. En ambas competencias, Argentina perdió en la final frente a Uruguay. En la primera cita mundialista, convirtió además dos goles.
Zumelzú falleció el 29 de marzo de 1973, a los 71 años. En un nuevo aniversario de su partida, todo el club lo recuerda con mucho cariño.
Efemérides
Adolfo Zumelzú, un todoterreno
Viernes 29 de Marzo de 2019
Llegó a Racing desde Sportivo Palermo y se consagró al ser una de las claves del equipo que ganó el título de 1925. Además, jugó en la Selección. Falleció el 29 de marzo de 1973.