Efemérides

Vladislao Cap, el Polaco de la Academia

Sábado 14 de Septiembre de 2019
Esforzado mediocampista central, arribó a la institución desde Quilmes en 1954 y se quedó hasta 1960. Disputó más de un centenar de partidos con nuestra camiseta y fue un referente que, además, coronó su juego con un título conseguido en 1958. En un nuevo aniversario de su partida, Racing lo recuerda con eterno cariño.
Vladislao Cap, el Polaco de la Academia
Primera verdad que está clara: la historia no empezó ayer. Segunda verdad indiscutible: la historia merece ser contada. Tercera verdad irrefutable: es fundamental conocer la historia para saber quién es uno y hacia dónde va uno. Racing, con 116 años de vida, con un pasado repleto de gloria, tuvo a lo largo de tantos años símbolos que forjaron la identidad del club, que desataron el amor de multitudes y que le entregaron la grandeza de la que todavía hoy disfruta. Por eso, como homenaje respetuoso, como saludo eterno, se los recuerda en las fechas que ya les pertenecen. A los ídolos académicos, simplemente gracias. 

El polaco no estaba en los planes de la defensa de Lanús pero apareció con sorpresa para dejar a Racing a tiro del empate que necesitaba para ser campeón. Era el 14 de diciembre de 1958 y el equipo de José Della Torre precisaba tan solo un punto para coronar una campaña en la que había sido mejor que todos gracias al excepcional rendimiento de una delantera inigualable. Vladislao Wenceslao Cap, parado en la zona del círculo central, entendió que había que ir para adelante y convirtió, cuando los suyos perdían por 3 a 1 y quedaba solamente media hora para el final, el segundo tanto. Pedro Manfredini marcó el tercero un rato más tarde y la Academia se adueñó del título.

Rubio y de ojos celestes, de familia polaca y húngara, Cap había nacido por Avellaneda el 5 de julio de 1934. Su arranque en el fútbol fue en Arsenal de Lavallol, en 1952, con menos de 18 años. A Quilmes arribó en 1953 y Racing lo compró, junto a Humberto Maschio y a Natalio Sivo, en 1954 por $15.000 para sumarle variantes a la línea de volantes. Sin tanta técnica pero con compromiso de sobra, se destacó a partir del esfuerzo. En el club, jugó hasta 1960 y disputó en total 135 encuentros. La contundencia no fue lo suyo, ya que solamente hizo 3 goles. Lo importante fue que uno valió casi un campeonato. 

Luego del paso por la Academia, rindió de gran manera en Huracán, en River y en Vélez. También fue convocado varias veces a la Selección y formó parte del plantel que compitió en la Copa América de 1959 y en el Mundial de Chile 1962. Ya como técnico, condujo a Boca, a River, a Chacarita, a Platense, a Independiente, a Ferro y a Liga de Quito. Además, fue uno de los entrenadores que dirigió al conjunto nacional en el Mundial de Alemania 1974. 

Cap falleció el 14 de septiembre de 1982 a causa de un cáncer de pulmón al que no pudo derrotar. A 37 años de su partida, Racing lo recuerda como a un grande que merece un justo y sincero homenaje.