La de hoy no fue una mañana más para Racing. Con la ilusión de continuar por la senda positiva de trabajo a lo largo de la pretemporada 2017 y al mismo tiempo, con la expectativa generada en torno al arranque de la etapa más exigente de las labores, esta mañana los jugadores dirigidos por Diego Cocca tuvieron su última jornada de actividad en Avellaneda y tras almorzar, se trasladaron hacia Mar del Plata. Por la tarde la delegación llegará a la ciudad costera y se instalará en la zona de Punta Mogotes.

El entrenamiento matutino tuvo como eje central una vez más a la pelota. Por eso después de las habituales labores de activación física, se pasó sin pérdidas de tiempo a distintas variantes futbolísticas con el uso del balón. En cada caso se priorizó la técnica individual y la repentización colectiva de movimientos a uno y dos toques frente a la presión, tanto grupal como en el uno contra uno. 

Primero se llevaron a cabo ejercicios de fútbol reducido en los que el grupo de atacantes y mediocampistas tuvieron como oposición a la línea de defensores. En este caso la prioridad pasó por mantener durante periodos largos de tiempo la tenencia de la pelota, ante la presión rival en bloques. Más tarde la cancha se dividió en dos sectores y en uno de ellos, en el que se emuló sólo una mitad del terreno, se trabajaron jugadas de ataque con combinaciones y variantes en cuanto a la proyección por los laterales.