No hay que ser un experto en la materia para que los números impacten: 512 partidos observados, 673 informes individuales y 172 presentaciones particulares. Pero es la única manera: trabajar, trabajar y trabajar para transformar a Racing en un ejemplo a escala local y continental. Diego Milito, con años de experiencia europea, volvió a la Academia con el objetivo concreto de generar una plataforma que le permita al club dar un salto cualitativo en lo que respecta a su proyecto futbolístico. Secretaría Técnica es el nombre con el que se empezó a desplegar desde enero una propuesta que, aunque sólo lleve nueve meses en escena, ya arrancó a imprimirle su sello a la institución.
 
“La clave está en enfocarse en el margen de error. El fútbol no es como las matemáticas: no hay forma de saber con exactitud qué va a pasar con tal o con cual jugador. Así que nuestro objetivo, a través de una metodología que construimos a partir de proyectos exitosos a los que venimos estudiando desde hace rato, es que Racing falle lo menos lo posible al momento de moverse en el mercado”, explica Milito cuando le toca ponerle palabras a ese sueño que lentamente se va haciendo realidad. Cinco son los criterios básicos elaborados para evaluar a los posibles candidatos a sumarse al plantel: posición, características, experiencia, actualidad e historial médico. El aporte técnico se vincula así con otras variables que surgen de las miradas del entrenador y de la Comisión Directiva. Del cruce de opiniones, fundadas en los datos generados por horas y horas de observación, terminan asomando los nombres que saltarán al Cilindro.
 
No está solo Milito en esta iniciativa bastante innovadora para el medio local: Miguel Gomis, coordinador de Inferiores; Diego Huerta, asistente técnico en Inferiores y responsable de los vínculos internacionales; Javier Wainer, jefe de scouting; Bruno Gentile, scout; y Agustín Anastasi, scout, completan un equipo de elite. Además, Federico Anastasi, encargado del uso de los GPS, funciona como nexo entre la Secretaría Técnica y el cuerpo técnico. “No es cuestión de enfocarse únicamente en el corto plazo. Claro que tenemos en cuenta que cada seis meses debemos intentar ofrecer las mejores alternativas para reforzar el plantel pero eso no nos impide en lo más mínimo proyectar qué Racing queremos para las próximas décadas. Por eso buena parte de nuestro esfuerzo está puesto en lo que sucede todos los días en el Predio Tita Mattiussi”, agrega el ídolo de la Academia para dar más detalles.
 
La cocina de la Secretaría Técnica está ubicada en una oficina en el complejo del Cilindro. Ahí se miran partidos de todas las ligas sudamericanas, se registran las actuaciones de los juveniles más destacados de las principales selecciones de América Latina y se acumula información vital para las próximas temporadas. Algunos ejemplos de lo ocurrido durante el último mercado de pases permiten ilustrar el modo de encarar esta ardua tarea: para reemplazar a Juan Musso –el séptimo pase más caro en el mundo para un arquero en los meses recientes-, se eligió a Gabriel Arias, de la selección de Chile, quien arribó con un 80 por ciento de efectividad en sus despejes y un 75,6 por ciento de pases claves logrados hacia adelante. En total, se siguieron en profundidad a más de 150 futbolistas para acabar trayendo sólo a siete –Arias, Eugenio Mena, Marcelo Díaz, Guillermo Fernández, Mauricio Martínez, Gustavo Bou y Jonatan Cristaldo-.
 
Con las ideas claras, Racing inició un camino que no piensa abandonar. Milito está al frente y la gente acompaña domingo a domingo. Lo mejor entonces está por llegar.