La historia empezó mal en Victoria. Pero puede terminar muy bien este martes en Avellaneda. Racing está dos goles abajo de Tigre en la serie que definirá al semifinalista de la Copa de la Superliga. Y a pesar de que el rendimiento del equipo en la noche de ayer dista de la Academia puede ofrecer (y ha ofrecido) adentro de la cancha, la expectativa por torcer el rumbo de la llave y superar al rival para avanzar de ronda se mantiene con firmeza. Y con el objetivo de comenzar a transformar la confianza en trabajo para salir adelante, el plantel se entrenó esta tarde en el Predio Tita Mattiussi. No hay mucho tiempo, pero sobran las ganas. 

La práctica realizada el predio del fútbol amateur académico giró sobre el eje de la recuperación. Por ese motivo los jugadores que fueron titulares ayer hicieron labores regenerativas. El resto del plantel realizó una entrada en calor con movilidad, para luego pasar a tareas con pelota en recepción, control y pases. Más tarde ese grupo hizo también fútbol en espacios reducidos. Por su parte Díaz y Ojeda se ejercitaron a un costado de la cancha. El mediocampista chileno efectuó movimientos físicos y también con el balón, mientras que su compañero en las tareas solamente trabajó en el aspecto físico.

Este lunes la jornada final de entrenamientos antes de la revancha copera será en horario matutino. El grupo académico trabajará en Avellaneda a puertas cerradas y sin posterior atención, para luego quedar concentrado por la noche, antes del juego del martes por la tarde en el Estadio Presidente Perón.