Para enfrentar deportivamente a la altura de las circunstancias lo que se viene a lo largo del semestre, hay que prepararse de igual manera en esta pretemporada. Y en Racing tanto el Chacho Coudet como sus dirigidos lo saben. Es por eso que el inicio de esta semana empezó del modo en que debía ser para la Academia: con mucho trabajo e intensidad para un plantel que busca una puesta apunto que lo ayude a  posicionarse de nuevo en la cima.     

Por la mañana el turno matutino se realizó tanto en el estadio como en el Predio Tita Mattiussi y constó de actividades orientadas a la fuerza física, la resistencia y a un primer contacto con la pelota que dejará a los jugadores listos también para las acciones de la tarde. De este modo la jornada comenzó en el gimnasio y luego pasó a desarrollarse en la cancha auxiliar, con fútbol reducido de cuatro a dos toques, antes de finalizar con pasadas intermitentes.

Luego del almuerzo y del descanso para toda la delegación tras el mediodía, el segundo turno se llevó a cabo en horario vespertino en la cancha auxiliar del estadio de Avellaneda y estuvo orientado plenamente al aspecto futbolístico. La entrada en calor tradicional devino luego en un ejercicio de fútbol de once contra once con formaciones mezcladas. En este caso Diego González no formó parte de los trabajos por un síndrome febril, mientras que Mena y Gómez se ejercitaron sólo con trote alrededor del perímetro de la cancha. 

Este martes Racing volverá a entrenase en doble jornada de trabajo. La mañana comenzará a partir de las 9.30 en el Tita Mattiussi, mientras que el segundo turno será por la tarde en el estadio. En ambos casos la práctica será a puertas cerradas para los medios de comunicación.