En los últimos tres años, las Divisiones Juveniles de Racing fueron distinguidas con el premio Fair Play, todo un símbolo de los valores que se les transmite a los chicos que se forman en el club. En línea con esa idea, fue que surgió la idea de implementar la tarjeta celeste para premiar a aquellos jugadores que se destaquen en los partidos por demostrar los valores del espíritu amateur, la solidaridad, el compromiso, la identidad y el amor por la camiseta. Y el sábado pasado fue la puesta en marcha del proyecto que se había aprobado recientemente.

Los árbitros de los partidos frente a Arsenal enseguida se sumaron y aceptaron la propuesta que les sugirió Racing y al final de cada encuentro sacaron la tarjeta celeste. En la Cuarta, el distinguido fue Gastón Kranevitter. En la Quinta, Federico Vietto vio la tarjeta que no es un castigo sino un premio. Y en la Sexta, el último encuentro disputado en el predio Tita, el elegido fue Mauro Genovese.