Pep Guardiola lo dijo hace algún tiempo: "Yo quiero ganar siempre pero sé que no es posible, así que por lo menos quiero elegir cómo pierdo". A Racing le tocó caer en el segundo encuentro de la serie de octavos de final del playoff de la Conferencia Sur pero lo hizo con la frente en alto, dejando hasta la última gota de sudor en la cancha y con una dosis de amor propio que por momentos silenció al Microestadio Comunal de Rivadavia. Detalles puntuales  del juego y una actuación polémica de los jueces impidieron el triunfo y le dieron la sonrisa a los locales por 69 a 67. 

El conjunto de Fernando Minelli comenzó mejor, aprovechó la poca efectividad en los tiros de la visita y se llevó el primer cuarto por 16 a 9. Agresivo en la defensa, Racing batalló desde el arranque para no ofrecer lanzamientos cómodos y complicó a Leonel Mosconi, la carta brava del ataque mendocino. Tampoco fue bueno el inicio del segundo parcial y Rivadavia, envuelto en un espiral de confianza, estiró la ventaja para pasar a dominar el desarrollo. Pero la Academia no abandonó y, a partir de la inteligencia de Maximiliano Bertolino, achicó la distancia para irse al descanso 33 a 29 abajo. 

Sobró actitud en la visita para compensar las 16 pérdidas propias y las faltas técnicas y las infracciones antideportivas sancionadas por los árbitros. La dureza defensiva fue determinante para que Rivadavia no se escapara en el resultado pero las equivocaciones en acciones puntuales impidieron que el equipo pudiera pasar al frente en el marcador. El dueño de casa, gracias a la mano de Abel Trejo, lastimó antes del último cuarto y encaró el final con una diferencia de 55 a 47. Pero todavía quedaba valentía para batallar en un escenario claramente adverso.

La Academia puso lo que había que poner y encontró en buenos rendimientos individuales la manera de incomodar al anfitrión. Julián Aguirre, Iván Antoniuk y Mariano Franco aportaron tenacidad y jerarquía y el partido se tornó electrizante. Podía ser para cualquiera. Quedaba menos de un minuto cuando Gonzalo Álvarez, el máximo anotador académico, embocó un doble para que los de celeste y blanco quedaran 67 a 65 arriba. En la jugada siguiente, Mosconi encaró, recibió una falta poco nítida y empató. Racing atacó sin lucidez, falló y, de contragolpe, cuando restaban sólo tres segundos, Rivadavia encestó para sellar el triunfo.

Con la serie 2 a 0, la Academia buscará la hazaña. El tercer duelo se jugará el viernes a las 21 en el Centro Deportivo (los socios con cuota al día podrán ingresar gratis) y Racing intentará empezar a torcer un destino que aún no está escrito. Será fundamental el aliento de la gente para conseguir la victoria que el plantel precisa para remontar la historia. Lo que quedó en evidencia es que se puede. Lo que nadie discute ni en Avellaneda ni en Mendoza es que todavía está por verse quién se clasifica a la siguiente instancia del Torneo Federal.

Síntesis

Rivadavia (69): Pérez Da Rold (4), Arancibia (8), Mosconi (21), Trejo (13), Giaveno (3), Alberici (6), Llave (8), García (6). DT: F. Minelli.

Racing Club (67): Zekas (3), Castaño (2), Álvarez (19), Bertolino (6), Franco (13), Antoniuk (14), Aguirre (7), Rioyo (1), García (2). DT: G. Intonio.

Síntesis: (16-9); (17-20); (22-18); (14-20).

Microestadio: Comunal de Rivadavia.

Fotos: Diario Uno (Mendoza).