Para mantenerse cerca de la cima era importante ganar y Racing, que venía de igualar como local ante Sarmiento, lo hizo con absoluta justicia en el encuentro correspondiente a la decimoctava fecha del torneo. En la tarde del lunes, en Estadio Centenario, la Academia sacó chapa y, gracias a un rendimiento colectivo parejo y sin fisuras, le ganó a Quilmes por 4 a 1. Con este resultado, ya son 31 los puntos que se acumulan en la espalda y la expectativa de cara a lo que queda del campeonato se enciende. 

Una primera mitad a pura contundencia fue suficiente para estampar diferencias. Una ráfaga de efectividad bastó para exponer la jerarquía celeste y blanca. El equipo de Gustavo Zapata repitió el libreto del encuentro anterior y salió a jugar con dos líneas de cuatro bien definidas. Germán Díaz y Mauro Leiva se movieron con libertad por delante de los dos volantes de contención y buscaron asistir a la dupla delantera. En cuanto la fórmula funcionó, llegaron los goles. Brian Mansilla ya había avisado al cuarto de hora pero no le salió y pudo sacarse las ganas a los 18 con una definición certera de zurda. Enseguida, aprovechando que el rival sufrió el golpe, apareció Leandro Zacarías para convertir el segundo y para aumentar la cuenta.

El conjunto de Omar Gómez fue en busca del descuento y se acercó con más ganas que fútbol. En una acción aislada, sin haber puesto previamente en riesgo la valla de Juan Musso, Quilmes lastimó. Iban 34 minutos cuando Leonel Demelchori le sacó jugó a una desatención dentro del área y marcó de zurda. Pero poco le duró el impulso al dueño de casa porque Leiva, sorprendiendo por derecha, se las ingenió para ganarse el hueco y para rematar contra el poste izquierdo de un arquero que nada pudo hacer para evitar la conquista. Al descansó llegó entonces la Academia con la tranquilidad de saberse superior en el desarrollo.   

Con orden y con paciencia se paró Racing de cara al complemento. La visita no solamente no se desarmó sino que apostó a rechazar los avances adversarios a través de una sólida estructura defensiva. Las pocas veces que Musso fue exigido respondió con firmeza y las chances quedaron puestas en el contraataque. Mansilla lanzó varios piques punzantes que podrían haber terminado en la red pero no acertó al quedar mano a mano con Marcos Ledesma. Zapata fue introduciendo variantes de a poco: Maximiliano Cuadra, Kevin Gutiérrez y Ulises Ojeda le dieron aire fresco a un equipo que no se equivocaba.

A poco del cierre, exactamente a los 38, Mansilla, el más desequilibrante de la cita, anotó el cuarto para darle forma de goleada a la victoria. Racing cumplió con creces y está de pie para seguir peleando.

Síntesis:

Racing Club (4): 1-Juan Musso (c), 2-Héctor Villalba, 3-Cristian Marcial, 4-Mauro Bazán, 5-Facundo Macarof, 6-Carlos De la Mata, 7-Germán Díaz, 8-Nahuel Marina, 9-Brian Mansilla, 10-Mauro Leiva, 11-Leandro Zacarías. DT: Gustavo Zapata.

Quilmes (1): 1-Marcos Ledesma, 2-Alejandro Gutiérrez, 3-Lucas Suárez, 4-Raúl Lozano, 5-Nicolás Paterno, 6-Tomás López (c), 7-Leonel Demelchori, 8-Manuel Díaz, 9-José Valdez, 10-Marcos Mosqueira, 11-Lucas Carrizo. DT: Omar Gómez.

Goles: 18’ Mansilla (RC), 20’ Zacarías (RC), 34’ Demelchori (Q), 36’ Leiva (RC), 83’ Mansilla (RC).

Cambios: 45’ 17-José Cubas por Díaz (Q), 69’ 18-Maximiliano Cuadra por Díaz (RC), 73’ 14-Lucas Rivadavia por Suárez (Q), 74’ 18-Franco Pedraza por Valdez (Q), 79’ 15-Kevin Gutiérrez por Zacarías (RC), 87’ 17-Ulises Ojeda por Mansilla (RC).

Amonestados: 72’ Paterno (Q).  

Suplentes: 12-Gustavo Serdán, 13-Rodrigo Torres, 14-Patricio Boolsen, 16-Matías Morales (RC); 12-Lautaro Ruschetti, 13-Ezequiel Ponce, 15-Gianfranco Vigneri, 16-Facundo Garcino (Q).

Árbitro: Ramiro Magallán.

Asistente 1: Hermes Gigante.

Asistente 2: Lucas Rapuli.

Cancha: Estadio Centenario.