El sol no fue suficiente para atemorizar a tantas sonrisas. Fueron más de 40 los chicos y las chicas, de entre 6 y 12 años, que participaron el último sábado de una hermosa jornada artística en el Cilindro. Invitados por el Departamento de Cultura, pudieron dedicarse durante largo rato a dibujar y a pintar en un escenario coloreado de celeste y blanco. Las familias no faltaron a la cita y el resultado de la movida fue la certificación de que Racing es más cosas que el fútbol.

Para variar perspectivas y para esquivar el calor, la Platea A también sirvió como refugio para dejar volar la imaginación. Luego llegó el turno de conocer el Recinto de Honor y la sala de conferencias de prensa. Hubo también bebidas, alfajores y golosinas para que la cita fuera completa. “Fue fabuloso cerrar un año de tanto trabajo adentro de la cancha. Los clubes deben poder abrirles caminos a las generaciones que vienen y esa es parte de nuestra tarea”, aseguró Daniel Higounet, responsable del área.

Con ganas de más, con ambición de crecer, la apuesta será entonces redoblar esfuerzos de cara a 2018.